Es Domingo por la tarde, llueve a cántaros y llevo cuatro horas de reloj sentada frente a mi Mac, el cuál aún no creo que sepa que se ha convertido en el hombre de mi vida. Supongo que si pudiera hablar diría lo de siempre: – ” Me encanta pasar las tardes contigo y que aprietes mis teclas, pero creo que no estoy preparado para una relación”. Menos mal que aquí quien paga manda y la máquina obedece.
Tengo dolor de cuello y se me nubla la vista pero en el fondo disfruto como una niña con zapatos nuevos. ¿Que por qué escribo este post? Pues no lo sé, porque no habla de belleza ni de nada que tenga que ver con maquillaje. Simplemente porque me apetece, porque al fin y al cabo es mi blog y mi vía de escape, porque necesito desahogarme y hablarle a un perro salchicha es algo que hago a diario pero no creo que hoy me valga.
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¿Qué es ser blogger?
Hace menos de un año que abrí el blog y cada día de estos últimos meses me han pasado cosas que jamás hubiera pensado. Todo ha sido muy rápido, los seguidores, las visitas, la gente que te felicita, que cada día te escribe cosas bonitas… De repente estar en el stand con una coleta mal hecha y un eyeliner de dudable calidad es un problema porque no sabes quién va a venir a conocerte. De repente mucha gente sabe que eres Ana Albiol, de repente llevas meses sin ir a ver a tu familia, de repente los hijos de tus amigas andan y tú no has tenido tiempo de verlos gatear…Y como eres padecedora, en el fondo cada día padeces un poquito por no “estar portándote bien” pero asumes que no eres Dios y que no puedes agradar a todos. Y sigues.
Y pese a todo ésto, doy gracias, porque me considero una persona muy afortunada. Porque hago lo que más me gusta y tengo la suerte de que a la gente le gusta como lo hago. Pero no os creáis que es todo de color de rosa.
Soy una persona que siempre ha llevado mal las críticas, y no digo que no las acepte, porque adoro las críticas constructivas, pero las que no lo son aún llegan a hacerme daño, y desgraciadamente en estos meses aparte de palabras bonitas también han habido otras no tan bonitas que a mí personalmente me han afectado. Supongo que es normal, es lo que tiene estar expuesta.
Hay gente que cree que por ser blogger te tratan diferente en algunos sitios. La verdad es que a algunas bloggers le pasa, a mí desde luego que no. Puede que sea porque no voy con un carnet de blogger pegado en la frente, o porque no se lo digo más que a las clientas que vienen y que creo que el blog puede ayudar en su día a día… De hecho, no me gusta que me llamen blogger, no me importa, pero prefiero describirme como “Maquilladora a la que le gusta comunicarse y exponer su trabajo”. Sí, es más fácil llamarme blogger, lo sé, pero creo de verdad que los bloggers son otra cosa. Yo no tengo ese gen.
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¿Mi día a día?
Cuando publico muchas de las cosas que hago me hace gracia que me decís que descanse, que no entendéis cómo puedo con todo y eso que no veis ni la mitad. Mi día a día es una auténtica locura y juro que el Lunes rezo para que llegue el Sábado y el Sábado para que sea Lunes. La cuestión, nunca puedo descansar de verdad, no se como lo hago… Bueno si lo sé, aún no he aprendido a decir que no. Soy poco asertiva, es mi asignatura pendiente, pero es que en el fondo me gustaría llegar a todo porque cada cosa que me proponen me apetece. Es algo que tengo que arreglar conmigo misma, no lo dudo.
Aprovecho en este punto para pedir disculpas a todo el mundo al que tengo abandonado de una forma o de otra. Familia (a mi abuela le voy a tener que regalar una tablet para verme), amigos, conocidos, seguidores que comentan a los que no me da tiempo a dar las gracias… etc. Si pudiera pedir un deseo sería sin duda que el día tuviera 36 horas, pero como no es viable, deciros desde aquí que aunque los días pasen y yo viva metida totalmente en el mundo 2.0, me acuerdo cada día de vosotros. (Vale, hay días que no me da tiempo a acordarme, pero en general me acuerdo).
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¿Objetividad e imparcialidad al hablar de productos?
Intento que toda la del mundo. En este punto tengo que decir que el Viernes por la noche vi en mis estadísticas que muchas visitas venían de Foro Vogue y Telva. Me dio por buscar en Google y navegar entre ellos y no daba crédito. Muchas chicas hablaban de mí en sus hilos, recomendándome como nueva Youtuber y veía mi nombre al lado de gente a la que admiro. Eso es un subidón, lo se, y agradezco que me recomienden, pero también vi críticas poco constructivas a muchas otras, y críticas con razón para las que se dejan comprar por marcas y anuncian sus productos que luego nunca vuelven a usar… Decidí darle a la cruz y cerrar.
Lo de las colaboraciones es algo que siempre he tenido claro, y varias veces he dicho que no a empresas que se han puesto en contacto conmigo para publicitar productos o marcas que no me convencen, con lo cual aprovecho el post para recordar que lo que me gusta lo digo, lo que no, ni lo nombro. Ah, y se me olvidaba, Nars no me paga por ésto ni me trata de una manera distinta a la de mis compañeros.
¿Cúanto dinero gano?
Una pregunta que oigo muchísimo y que aprovecho para responder. Cero. Y cero es cero. El blog de momento no me da nada, y el canal tampoco, pero es que no es mi objetivo. No voy a ser hipócrita diciendo que no quiero dinero, claro que sí, como todos, pero de momento no está entre mis prioridades. No empleo tiempo enviando emails para que se anuncien en un banner, prefiero contestar dudas de seguidoras, y tampoco he hecho nunca un post patrocinado. Puede que muchas no me creáis, pero los que me conocen saben que ni siquiera me molesto en hacer posicionamiento, porque ésto es una forma de pasar mi tiempo haciendo algo que me gusta. Prefiero emplear mis horas maquillando para un vídeo que etiquetando una foto para que Google la encuentre y tenga más visitas. Si no ¿Por qué iba a poner títulos como “007. Licencia para secar flequillos”? No creo que nadie use esas palabras en un buscador pero lo que me importa es que mis seguidores se diviertan con cada post, y está funcionando. Es mi forma de hacer SEO, que la gente se enganche por el contenido y lo comparta. Creo que últimamente el boca a boca está poco valorado.
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¿Objetivos a largo plazo?
Ninguno. Y que esto salga de mi boca es muy fuerte. Ni mi psicoanalista se lo cree. Yo, que he sido la persona más previsora y controladora del mundo, que a los veintiún años estaba planeando qué haría a los veintiséis… Ahora mis únicos objetivos son a corto plazo y muy claros. Uno, hacer que el post y el vídeo de la semana tengan la máxima calidad posible para que gusten y la familia siga creciendo. Dos, seguir trabajando duro en Nars para poder optar a momentos tan gratificantes como el de Zurich. El largo plazo sólo será consecuencia de mi día a día.
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Keep Going
Son dos palabras que siempre me acompañan. Para las que no controléis el inglés ni el traductor de Google, es algo como “Sigue adelante”. Es una expresión que me dijeron mucho cuando vivía con la familia inglesa y los días a veces eran complicados de llevar. El padre de los niños siempre me ponía la mano en el hombro y me decía esa frase con su fantástico acento inglés. No se por qué pero sus palabras me hacían que siguiera y siguiera y no perdiera tiempo lloriqueando y lamentándome, y creo que es el secreto. A mi me encanta quejarme, nací para eso y para llevar pinganillo, pero en los últimos meses ésto ha cambiado, yo he cambiado. De hecho, desde que abrí el blog sólo me he centrado en eso, en “seguir adelante”.Un vídeo ha salido con calidad pésima, sigue, ni pienses en el qué dirán, haz el siguiente mejor. Una foto con luz horrible, un maquillaje mal difuminado, no pasa nada, sigue adelante. Un post con pocas visitas o una semana en la que no sube ni un seguidor, vale, sigue. Un comentario desafortunado, la envidia, alguna zancadillita… vale, no pierdas tiempo, sigue adelante. Y en ello estoy.
Gracias
Y antes de acabar (si has llegado hasta aquí después de tanto tostón eres un campeón/a), dar las gracias. A todos, a los 3.000 de aquí, los 2.000 de allá, los 7.000 de más allá… A los que me compartís sin pedir nada a cambio, a los que me ayudáis con enfoques, desenfoques o con coaching emocional, a los que le dáis a me gusta, me comentáis y recomendáis, a los que venís sólo a saludar, incluso hasta a los que hacen como que el blog no existe pero ven los vídeos a escondidas. A los que me escribís mensajes y esperáis respuesta durante días y a los que incluso sin tenerla seguís insistiendo. A todo mi mundo, que ahora es muy grande, gracias por estar ahí, porque este año va a acabar de una forma increíble, porque con todos vosotros me ha tocado la lotería personal.
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Ana.
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